Desafíos, experiencias y lecciones aprendidas en Argentina y en la región en la búsqueda de sumar valor al cuidado de la salud, según participantes de una nueva Jornada Abierta de la Comunidad de Salud Basada en Valor que organiza el IECS.
Un centenar de asistentes participó en la tarde del martes 2 de septiembre de la 4° Jornada Abierta de la Comunidad de Salud Basada en Valor organizada por el Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS), un espacio colaborativo y transversal donde actores relevantes de Argentina y la región compartieron desafíos y experiencias en el esfuerzo de mejorar los resultados relevantes para los pacientes de manera sostenible.
“A menos que integremos a todos los actores involucrados, financiadores, productores de tecnología, prestadores y pacientes o usuarios, el sistema no puede cambiar. Necesitamos estas discusiones para transformar la realidad actual hacia un sistema basado en valor, porque tenemos que modificar de forma urgente los resultados y la experiencia de los pacientes y hacerlo viable en términos de sustentabilidad económica”, manifestó el Dr. Ezequiel García Elorrio, especialista en medicina interna, doctor en medicina, máster en epidemiología y en administración de empresas, y director del Departamento de Calidad, Seguridad del Paciente y Gestión Clínica del IECS.
El encuentro de la tarde lo inició el Lic. Gabriel Oriolo, titular de la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) entre enero de 2024 y junio de 2025, quien consideró que el sistema de salud de Argentina enfrenta, al igual que los de Occidente, tres problemas: cambios demográficos (“caída fuerte en los partos y aumento en la expectativa de vida”), falta de profesionales médicos y aumento en el costo de los medicamentos.
El siguiente expositor, el Dr. Waldo Ortega Flores, médico de familia, jefe de la Unidad de Salud Basada en Valor de la Clínica Alemana de Santiago, Chile, enfatizó que hacer buena medicina es “hacer lo que hay que hacer, a la persona correcta, en el momento correcto y con los recursos correctos”. El Dr. Ortega postuló que “no hay salud basada en valor sin atención basada en personas, sin eficiencia y sin mejora continua”.
El Dr. Carlos Kerguelén, médico cirujano con una maestría en política y planificación de la gestión de salud, subdirector de Métricas de Desempeño Clínico de la Fundación Santa Fe de Bogotá, en Colombia, afirmó que existen una serie de elementos estructurales más o menos establecidos frente a una agenda de Salud Basada en Valor que generan el reto de cómo llevarlas a la práctica en entornos específicos. “Uno no se puede quedar en el discurso bonito de que está trabajando en valor, hay que meterse en la trinchera a desarrollarlo”, enfatizó el Dr. Kerguelén.
“Aprendemos más del fracaso que del éxito”
¿Cuáles son algunas claves de la implementación de la Salud Basada en Valor? ¿Por qué hay que tener hoy en día sistemas basados en valor?
En el primero de tres paneles, cuatro actores de distintas industrias compartieron su perspectiva. La Lic. Giselle Tutor Oportus, directora de Acceso al Mercado, Innovación y Asuntos Públicos de Medtronic Latinoamérica Sur rescató la necesidad de volver a conectar con el propósito de todos los que trabajan en el sector salud: salvar vidas y entregar mejores servicios. Trabajar en valor “tiene que ver con el contexto que nos apremia y nos obliga a repensar el modelo, pero también es una indicación para que recordemos por qué cada uno de nosotros trabaja en este sector y no en otro”, expresó.
La Dra. Carolina López Canelo, Country Lead de Sanofi Argentina, manifestó que desde la industria farmacéutica son conscientes de que la innovación en tratamientos “tendrá sentido en tanto y en cuanto pueda ser accesible para todas las personas que lo necesitan”.
Por su parte, el Dr. Leonardo Garfi, vicedirector médico y responsable de Planeamiento Estratégico del Hospital Italiano de Buenos Aires, afirmó que los sistemas de salud en el mundo están enfrentando una “crisis poderosa” de múltiples niveles, pero el primero de ellos no es una crisis de costos o de presupuesto, sino que es una crisis de valor: “Estamos buscando alinear un montón de visiones diferentes para tratar de salvar un sistema que, en última instancia, también nos tiene que salvar a nosotros, que al final vamos a ser pacientes”, precisó.
El Dr. Gabriel Novick, director médico corporativo de Swiss Medical Group, ex subsecretario de Salud de la Ciudad de Buenos Aires y profesor invitado de varias universidades del exterior llamó la atención sobre el hecho de que el nivel de desperdicio de la industria de la salud llega a 30 %, casi el doble que en la industria de la fruta y quince veces más que en la automotriz. “La medicina de valor agrega más valor por el dinero que se invierte en el cuidado de la salud. No es una opción, es una necesidad para seguir teniendo el acceso a la innovación que aporta la industria de la salud”, enfatizó.
“Un salto de fe”
En otro de los paneles, cuatro expositores revelaron experiencias y aprendizajes de implementación de iniciativas de Salud Basada en Valor.
El Dr. Santiago Catalán Pallet, subjefe de Reumatología del Hospital Universitario Austral y director del proyecto Gestión Integral Ambulatoria en la misma institución, reflexionó que trabajar en Salud Basada en Valor no tiene como objetivo llegar a un resultado en el corto plazo, sino “dar un salto de fe junto con otras personas que dan ese saltito con vos”. Luego, compartió los desafíos y los avances en la estrategia de implementación de una unidad de práctica integrada para el abordaje de pacientes ambulatorios con diabetes tipo 2 que está constituido por tres actores fundamentales del sistema de salud: la institución, el plan de salud y la industria (en este caso, el laboratorio Roche), para definir un “circuito de paciente” estandarizado y minimizar los desperdicios del proceso. Los primeros resultados estarán el próximo mes, anticipó.
La Dra. Karin Kopitowski, médica de familia, directora del Departamento de Investigación del Instituto Universitario del Hospital Italiano de Buenos Aires, señaló que desde hace muchos años se pregunta por qué cuesta tanto dejar de hacer lo que no hay que hacer. “Un 20-30 % de lo que hacemos en el accionar sanitario es de bajo valor. Y el problema más grande de las prácticas de bajo valor es que tienen el potencial de dañar. Y por eso el cambio de cultura que tenemos que hacer es que más no es siempre mejor y que si no es necesario puede hacer daño”, remarcó.
El contador Gabriel Mulero, gerente general de Los Pinos, una entidad de más de 100 años en la Argentina en el cuidado de los mayores adultos y de la rehabilitación integral a personas adultas con limitaciones funcionales, expuso sobre una serie de transformaciones en los últimos años para revigorizar la gestión de un centro de tercer nivel donde el cliente toma todas las decisiones. “El valor percibido va más allá de la medicina, va en el trato, va en cómo lo atienden o en cómo le sirve la comida. Y el valor se lo tenemos que dar al grupo familiar también”, enfatizó.
El Dr. Federico Levy, nefrólogo, máster en nefrología intervencionista y diagnóstica y miembro del equipo de ciencias médicas de Medtronic LATAM, presentó datos sobre la evolución en Argentina y la región de una propuesta de valor de la compañía que consiste en un programa de protección de resultados para dispositivos de alto costo en patologías cardiovasculares frecuentes. Hasta el momento se han implementado más de 100 programas de este tipo en 6 países. “Es un mecanismo por el cual compartimos el riesgo y podemos reintegrar o compensar al pagador cuando las cosas no salen como esperábamos, no por falla del dispositivo, sino por la misma evolución de la enfermedad”, expresó.
Cerró el panel el Dr. Matías Mirofsky, subjefe del Servicio de Clínica Médica del Hospital Municipal de Agudos “Dr. Leónidas Lucero” de Bahía Blanca, quien expuso sobre el desarrollo y los primeros resultados de un proyecto de hospitalización domiciliaria en su institución. La iniciativa tomó forma a partir de fines de 2022 y buscó optimizar la capacidad de respuesta a la demanda de la mayor parte de la población. Los resultados de los primeros dos años han sido muy satisfactorios: con más de 550 internaciones domiciliarias, el porcentaje de reinternación fue de 17 %, la tasa de aceptación de pacientes y familiares superior a 95 % y el costo día cama, inferior al correspondiente a la hospitalización convencional. ¿Algunas lecciones aprendidas? “Las situaciones de crisis también abren oportunidades; el subsistema público también puede implementar estrategias de valor; la resistencia al cambio entre profesionales se puede modificar; y en la ecuación costo-beneficio, todos se benefician”, enunció.
La jornada concluyó con un panel sobre Salud Digital con propósito de valor de la que participaron el Dr. Alfonso Fernández Pazos, médico especialista en medicina interna y máster en administración de negocios (MBA), quien se autodefine como un “apasionado de la transformación digital en el sector de la salud” y es director médico de Innovamed, una empresa que ofrece soluciones digitales para médicos, farmacias, instituciones de salud y pacientes; el Dr. Federico Pedernera, médico especialista en informática médica, MBA, exsubsecretario de Vigilancia Epidemiológica, Información y Estadísticas de Salud del Ministerio de Salud y actual CEO de Innovamed; el Lic. Pablo Kruls, MBA, cofundador y director comercial de Motivia, una plataforma que mejora la adherencia al tratamiento en enfermedades crónicas y poco frecuentes; y el Dr. Gustavo Daquarti, cardiólogo y científico de datos, cofundador y líder de IA de ÜMA Salud IA, una plataforma apalancada en inteligencia artificial que busca proporcionar un acceso ágil, seguro y de calidad a los servicios de salud, combinando tecnología y telemedicina. “Las soluciones tecnológicas pueden aportar valor real al sistema de salud”, coincidieron.